Buñuelos extremeños

Hola, ¿qué tal? ¿Os apetecen unos buñuelos?

Sí, ya sé que los buñuelos son típicos de toda España; pero sí que es verdad que, dependiendo de cada comunidad, se hacen de una forma u otra; por ejemplo, no son iguales los buñuelos de viento a estos que hoy os traigo. 

Incluso he visto diferentes recetas de buñuelos extremeños que cambian según la zona donde se preparen; en algunos lugares le añaden huevo, leche, etc. Pero como buñuelos hay de muchas clases al igual que abuelas en el mundo, los que yo aquí os muestro hoy son los buñuelos que he visto preparar a mis abuelas, esos que se hacen con embudo y cuyos ingredientes no son más que agua, sal, harina e impulsor. Como veis, por sus ingredientes, son parecidos a la masa de churros pero mucho más ligera. Creo que a este tipo de buñuelos también se les conoce en Extremadura como buñuelos de puchero, pero vamos, que yo les llamo "buñuelos" a secas porque para mí son los que conozco desde siempre.

Hace un tiempo, descubrí unos dulces de Estados Unidos que me recordaron a estos buñuelos. Se les conoce como Funnel Cake (pastel de embudo, en español) y por lo visto, la masa también se echa a la sartén con un embudo y se fríe en aceite. Aunque los Funnel Cake son iguales en forma y manera de hacerlos, cambian un poco los ingredientes. La verdad es que cuando los vi por primera vez pensé "si son los buñuelos de toda la vida, verás cuando les comente a mis abuelas que ahora son moderneces llamadas Funnel Cake".

Pero bueno, dejémonos de Funnel Cake y vamos a por la receta de estos ricos buñuelos extremeños.

¿Los habéis probado así? Si la respuesta es no, ahora no tienes excusas. Así que ya sabes, busca un embudo que empezamos.

Ingredientes:

250 ml. de agua tibia

200 gr. de harina

15 gr. de impulsor (levadura química o bicarbonato)

3 gr. de sal

Aceite para freír, puede ser de oliva o girasol

Azúcar, azúcar glas o miel para decorar (opcional)

Elaboración:

En un bol tamizamos la harina junto con el impulsor y agregamos la sal. Mezclamos con unas varillas manuales. Agregamos entonces el agua de poco en poco, recuerda calentarla unos segundos para que esté tibia, a la vez que vamos mezclando con las varillas para que no queden grumos. Tapamos el bol con papel film y dejamos reposar la masa unos 30 min.

Ponemos una sartén con abundante aceite al fuego. Echamos la masa de buñuelos en un embudo procurando tapar con un dedo el agujero para que no salga la masa por él. Cuando el aceite esté caliente, colocamos el embudo sobre la sartén, retiramos el dedo y dejamos que la masa caiga en el aceite. ¡Ojo! No tienes que meter el embudo en la sartén, sino desde arriba, dejar caer la masa. No te preocupes porque el aceite no salta.

Vamos haciendo un movimiento circular para que el buñuelo quede con forma de rueda. Cuando tengamos la forma, tapamos de nuevo el agujero del embudo para impedir que caiga más masa. Dejamos dorar un minuto o dos y después le damos la vuelta para que se cocine por la otra cara. 

Sacamos a un plato con papel absorbente y hacemos lo mismo con el resto de la masa.

Para terminar, podemos servir los buñuelos espolvoreados con azúcar normal, azúcar glas o miel. Puedes comerlos para desayunar, merendar e incluso cenar con una buena taza de chocolate caliente, café o lo que más te guste.