Pastel de Plátano, Nueces y Chocolate Blanco

por - enero 26, 2014


Buenas tardes pasteleros!!
Tengo poquísimo tiempo para publicar, y cada vez que encuetro un hueco intento poner algo. Os dejo con esta receta fácil y siempre rica, lo prometo ;) 


Ingredientes:
4 plátanos maduros.
200 gr. de matequilla.
200 gr. de azúcar.
100 gr. de harina.
4 huevos.
1/2 cucharadita de bicarbonato.
1 cucharadita de extracto de vainilla.
1 cucharadita de levadura química.
1 pizca de sal.
1/2 vaso de leche.
80 gr. de nueces de macadamia.
Chocolate blanco cortado en trocitos (cantidad al gusto).

**Nota: Yo he utilizado un chocolate blanco con yogur y fresas, ñaaaaaaaaaaaaam; pero sirve cualquiera.



Elaboración:
Precalentar el horno a 180º con calor arriba y abajo.
Tamizar la harina, la levadura, el bicarbonato y la sal; y reservar en un bol.
Batir con las barillas la mantequilla (que esté en pomada, blandita) con el azúcar y el extracto de vainilla. Añadir los huevos uno a uno, mientras batimos bien cada vez que añadamos un huevo. Hasta que el primero no se haya integrado bien, no echamos el segundo; y así sucesivamente hasta integrar los 4.
Aplastamos los pátanos con la leche hasta que quede una papilla y añadimos al puré las nueces picadas y el chocolate en trocitos (como si fueran las típicas chispas de chocolate).
Mezclamos los ingredientes secos, del primer bol, con la mantequilla hasta que los tengamos bien incorporados. Añadimos el puré de plátanos a la mezcla anterior y lo mezclamos perfectamente hasta conseguir una masa homogénea.
Engrasamos un molde con matequilla, echamos la masa y la horneamos a 180º calor arriba y abajo durante 45-50 minutos.
Como siempre, antes de sacarlo del horno, pinchamos con un palillo en el centro del bizcocho. En otras ocasiones, he comentado que el palillo tiene que salir limpio para considerar que el bizcocho está listo; sin embargo en éste, el palillo debe salir un poquito manchado, que al tocarlo veamos que está viscoso pero no líquido. Será entonces cuando podemos apagar el horno y lo dejamos reposar unos minutos dentro.
Lo sacamos y dejamos enfriar por completo. Una vez frío podemos desmoldar, cortar y servir.

¡Que lo disfrutéis!

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